He tenido el honor de charlar con Santiago Liberal y Carlos Toral en su programa de Onda Marina "La Taberna de los Culturetas". Un rato muy cordial hablando de poesía. Ha sido un gusto oír mis poemas en sus voces.
He tenido el honor de charlar con Santiago Liberal y Carlos Toral en su programa de Onda Marina "La Taberna de los Culturetas". Un rato muy cordial hablando de poesía. Ha sido un gusto oír mis poemas en sus voces.
El esquema del libro es muy sencillo: Está formado por cuarenta y siete capítulos, cada uno de ellos dedicado a un tema. Primero hay una presentación, clara pero llena de encanto literario, sobre la relación entre el tema y la poesía. Después propone una práctica de escritura al hilo de lo que ha expuesto; y por último hace algunas recomendaciones, generalmente lecturas, pero también películas, paginas web, visitas a museos...
Los capítulos son muy breves, no más de tres o cuatro páginas cada uno; y el lenguaje cercano y desenfadado. Entre los temas que trata, hay muchos muy relacionados con la idea de poesía (amor, amistad, muerte, tiempo, silencio...); pero hay otros muy lejanos: el reguetón, la política, la publicidad, la televisión o el fútbol. Carmen consigue expandir el concepto de poesía y desprenderse de tópicos preconcebidos.
Habla de la poesía con mucho respeto, casi con devoción, pero también con mucha cercanía, desmitificándola, haciéndola accesible
Yo recomiendo una primera lectura del tirón (es un libro corto y ameno, que se lee en poco tiempo). Y, ya con la visión de conjunto, volver a él para darle el uso que cada uno requiera:
Se puede tomar como un libro de texto. Ir siguiendo pacientemente los capítulos, detenerse en cada uno, reflexionar sobre las ideas que plantea Carmen, realizar las prácticas que propone , buscar y leer algo de los libros que recomienda... Recorrer completo y por su orden el itinerario que Carmen ha trazado,
O bien puede ser una obra de consulta. Acudir a ella de vez en cuando y abrirla al azar, en busca de una idea inspiradora, de una palanca que nos saque de un atasco creativo.
Es decir, este manual puede ser útil para quien comienza a escribir poesía, y quiere obtener una visión de conjunto de aquello a lo que se enfrenta y de las herramientas a su disposición, pero también para el poeta veterano que busque recursos nuevos que le saquen de los momentos de estancamiento que inevitablemente llegan de vez en cuando.
También es una obra recomendable para quien no escriba poesía ni tenga intención de hacerlo, pero sí tenga interés en leerla. Después de recorrer este manual, podemos acercarnos a un libro de poemas con muchos menos prejuicios, y descubrir en él detalles y matices que se nos habrían pasado por alto y que harán mucho más placentera la lectura.
Suelo decir que lo mejor de la poesía es los amigos que conoces con la excusa de la poesía. Un excelente ejemplo de eso es Antonio Daganzo. Nos conocemos desde hace más de quince años, y en ese tiempo hemos compartido lecturas, recitales, viajes, y sobre todo charlas interminables sobre literatura y sobre música; charlas en las que he aprendido, he descubierto, y sobre todo he disfrutado.
Antonio, con su habitual generosidad, ha dedicado una reseña a mi poemario Los libros y la noche. Ha hecho una lectura atentísima del libro, y lo analiza de forma detallada y minuciosa. Gracias, amigo.
Enlace a la revista Entreletras: Los libros y la noche en Entreletras.
No he disfrutado de una de esas colas interminables que se forman (afortunadamente) delante de muchas casetas. Pero el encuentro con viejos amigos, y la breve charla con lectores nuevos, son uno de los gozos que te da la poesía. Gracias a todos.
Las Ferias del Libro son puntos de encuentro fundamentales
para el mundo literario y editorial. Están las grandes ferias internacionales:
Frankfurt en Alemania y Guadalajara en México. En España destacan la Feria del
Libro de Madrid y Sant Jordi en Barcelona. También hay ferias de mucha calidad
en pueblos y ciudades más pequeños… Y está la Feria del Libro de Navahermosa (Huelva).
Navahermosa es una aldeíta de treinta habitantes, escondida
entre castaños, acebuches y olivos en la sierra de Huelva. Uno podría esperar
que un lugar tan despoblado y apartado languideciera de aburrimiento, pero nada
más lejos de la realidad. Gracias a la asociación Navahermosa Viva Participa la
actividad cultural es constante: Belén navideño, Carnaval, delicias de
cuaresma, procesión del Corpus, exposiciones, talleres.
Entre esas actividades destaca la Feria del Libro. La
tercera edición se celebró el pasado 17 de mayo. Lo primero que llamaba la
atención al llegar ese día a la aldea es que el pueblo, literalmente, estaba
lleno de libros. Los vecinos pusieron libros en las ventanas, o en mesitas y
estantes que sacaron a las puertas de las casas.
En la feria, junto a expositores de librerías y editoriales
(pequeños, pero bien surtidos), había un apretado programa de presentaciones de
libros: Poemarios, libros de fotografía, novelas… Cada presentación tenía un
público de treinta y cinco o cuarenta personas (Sí, más público en las
presentaciones que habitantes tiene la aldea), que escuchaban con interés, que
participaban, que comentaban, que compraban el libro del que se hablase.
Compartir los libros, la comida, la tarde. Convivir en torno a la literatura. Si alguna vez la cultura andaluza está en peligro, las trincheras para defenderla estarán en sitios como Navahermosa.
Mi buen amigo Daniel García Florindo, en su más que recomendable blog "Aula poemática" ha dedicado una reseña a Los libros y la noche. Es un análisis amplio, riguroso, concienzudo y lleno de generosidad. Daniel ha leído con detenimiento cada poema, y los disecciona, encontrando detalles que ni yo mismo sabía que estaban. Este es solo un fragmento:
"...estamos ante una obra poética que ofrece al lector de su poesía no solo un testimonio vital (es decir, una poesía de la experiencia que conecta con la modernidad romántica, esa herida que abordaremos más adelante), sino una conciencia estoica ante la adversidad o una lección existencial de dignidad que niega cualquier atisbo de patetismo, de manera que encontramos un equilibrio vertebral entre el pathos (el sufrimiento, la emoción ante la adversidad) y el ethos (el carácter, la dignidad, la resiliencia), un binomio necesario y complementario que van a sintetizarse en el logos del poema...".
Gracias, Dani, por el trabajo y el cariño que has puesto en tu reseña.
El miércoles 14 de mayo, a las 19:00, estaré en Sevilla, en la librería Botica de lectores, en Nervión, en la calle Rico Cejudo.
Y el sábado 17 de mayo subiré a Navahermosa, en la sierra de Huelva, a participar en su Feria del libro.
Antonio J. Sánchez en la feria de Navahermosa
Feria del libro de Navahermosa
Siempre volver al sur:
¿Por qué me desenterraste del mar?
R. Alberti
Yo me creí Machado y soy Alberti:
me acomodé en la estepa castellana
a cientos de kilómetros del mar.
Creí habitar la calma gris, el frío,
la lenta austeridad de cada piedra.
Creí ser Escorial en vez de Alhambra
y ahora he de aceptar que soy nostalgia
del rojo, del azul y el amarillo;
sólo eso: anhelo de horizontes
calcinados de luz y aire salado;
y no hallaré descanso hasta que pueda
quemarme las pupilas contra el agua,
volver a echar raíces en la orilla.